domingo, 8 de agosto de 2010

RITUAL PARA LA CELEBRACIÓN DEL SACRAMENTO DEL MATRIMONIO

RITUAL PARA LA CELEBRACION DEL MATRIMONIO

La Conferencia Episcopal Argentina ha publicado el nuevo Ritual para la Celebración del Matrimonio, que ha sido revisado y aprobado por la Santa Sede el año pasado.

Son dos volúmenes, uno dedicado al ritual propiamente y el otro a las lecturas bíblicas.

Los cambios no son solamente lingüísticos o de forma, sino que aparecen muchas fórmulas y ritos nuevos que enriquecen la eclesiología y pastoral del Matrimonio y de la Familia.

“el Ritual para la celebración del Matrimonio es uno de los libros litúrgicos del Ritual Romano que admite mayor grado de inculturación, adaptación y acomodación”

Después del Concilio Vaticano II ha habido dos ediciones del Ritual, una en 1969 y la typica altera del Ordo celebrandi Matrimonium de 1990 que ha recogido la doctrina sobre el Matrimonio de los textos conciliares, de Familiaris Consortio y del Código de Derecho Canónico.

Los textos eucológicos y las bendiciones, muestran mejor que la celebración es propiamente sacramental (en el caso de dos bautizados) y eclesial. Como así también el carácter epliquético de las bendiciones, nos ayudan a ver la acción de la Gracia divina y la santidad de la vida matrimonial.

Es interesante la inclusión, aunque facultativa, de la memoria del Bautismo, mediante la cual los esposos renuevan su compromiso cristiano, reafirman su filiación divina y su cordial pertenencia a la Iglesia, y la comunidad a su vez pide a Dios que reavive en todos y especialmente en los contrayentes, la bendición originaria.

La participación de los novios, que son los ministros del Sacramento, es mucho más activa. Tanto en la formulación de su estado de libertad y compromiso de asumir las obligaciones propias de la vida matrimonial y familiar, como en la expresión del consentimiento, por el que se unen para siempre.

Otra novedad es el formulario de la celebración del Matrimonio ante un Asistente Laico (es bueno recordar que este es un caso excepcional que requiere el nombramiento del Obispo con el visto bueno de la Conferencia Episcopal) y el Rito de la celebración entre un católico y un no bautizado pasó a llamarse Celebración del Matrimonio entre parte católica y parte catecúmena o no cristiana.

Respecto del Leccionario para la Celebración del Matrimonio, que ha sido editado en volumen aparte, consta de cuatro formularios con lecturas del Antiguo y del Nuevo Testamento, Salmo responsorial y Aleluias. Además agrega otras lecturas a elección.
Este Leccionario puede utilizarse siempre que no haya lecturas propias obligatorias como lo señala la Tabla de los días litúrgicos. Dichas lecturas también pueden ser tomadas del Leccionario de la Misa IV.

La dinámica, la profundidad teológica y eclesiológica, la clara relación entre Matrimonio, Iglesia y santidad de vida, la participación en primera persona de los contrayentes y la elección de los textos sagrados, le han dado a la Celebración un sentido mucho más profundo y sagrado.

Finalmente la entrega de la Biblia, o una Cruz o una imagen, muestra la intención de la comunidad de acompañar a la nueva familia que nace.

Como si algo faltara para completar la riqueza y belleza es este material litúrgico, se han agregado la celebración para el aniversario del matrimonio y el ritual para el compromiso de los novios.